El naipe número XIII del Tarot representa a la Muerte, un esqueleto armado con una guadaña que siega alrededor cuanto encuentra a su paso, dejando tras de si los miembros desparramados de sus víctimas.
Dice Stuart R. Kaplan, a propósito de esta carta: En ocasiones, la siega y limpieza de los campos por parte del esqueleto provoca el florecimiento y regeneración de antiguas almas y nuevas plantas. La energía del esqueleto sirve como fuerza de ruptura para soltar las cadenas que atan y detienen el cambio. La carta de la Muerte representa la modificación radical de la decadencia y la transición al renacimiento.
Este año 13 del tercer milenio ha dejado atrás al año 12: una año de injusticias, salteadores, corruptos, sátrapas, gentuza y toda la escoria de un poder político y económico en total decadencia que, desde el cinismo, la codicia y la mezquindad más absolutas, sangra como vampiro a sus indefensas víctimas.
La cuchilla de la guadaña del esqueleto del naipe XIII del Tarot y la interpretación de Kaplan nos llevan sin solución de continuidad a otra cuchilla, la de la Igualadora, el símbolo por antonomasia de la Revolución francesa, que propició la promulgación de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, de los que hemos venido viviendo, mal que bien, hasta ahora. (El Estado de Bienestar, al que acaban de enterrar el año 12, era nieto legítimo de la Ilustración que en 1789 se encargó de segar el antiguo régimen).
Feliz Año XIII y ¡cuidado con el pescuezo! Ya vemos que el Arcano del Tarot pronostica una etapa de cambio donde van a ser frecuentes los afeitados. Parece que se va a llevar el pelo muy corto.
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